Esta zorrita veinteañera de buenas tetas se pone cachonda a tope cuando coincide en el ascensor con el nuevo vecino, un monitor de gimnasio super atractivo. Se le hace el coño agua practicamente. Imagina de hecho cómo seria si luego el chico llamara a su puerta para comerla el coño y pegarle una buena follada.
Vaya dos tias mas putas. Muy zorras totales. Quedan para jugar juntas al baloncesto en casa de un amigo, el cual hace de árbitro para que ellas puedan entrenar. Pero ellas tenian otros planes al parecer. Y es que no aguantan mucho sin pasar de partido y ponerse de rodillas a sacarle la polla del pantalón. Mamadón que le hacen a dos bocas antes de follárselo juntas.